elecciones generales

Hace unos días planteé en otro hilo de foro un tema nuevo que, al parecer no ha tenido mucho éxito (por no decir ninguno) que era que dado lo que podemos esperar de los dos grandes partidos políticos de este pais, que opción deberiamos seguir los empleados públicos: votar a partidos alternativos, abstención, votar en blanco, etc, yo considero que sería un debate muy interesante plq vuelvo a insistir en el tema a ver si alguien se anima. Vuelvo a recordar mi opinión al respecto: personalmente considero que deberíamos de votar masivamente a partidos de izquierda de verdad ya que la única alternativa que se me ocurre para tratar de frenar las barrabasadas de los grandes partidos es que en este pais haya una izquierda fuerte.

Saludos

El hartazgo de los partidos mayoritarios no es exclusivo de nuestro colectivo. Lo malo es que se está generando un peligroso caldo de cultivo propicio a los oportunistas y populistas de la peor laya. Hay que tener mucho en cuenta el tipo de elección y la circunscripción electoral para saber cómo va a funcionar nuestro voto y qué correlación de fuerzas está en juego en esa circunscripción.

La clase política está acabada, ninguno vale nada, la democracia ha quedado en papel mojado, nadie escucha la opinión del pueblo, el cual es ignorado sistemáticamente en todas sus opiniones.

Ahora que existe un gran acceso a los medios informáticos y telemáticos, deberíamos ser consultados mucho más a menudo, tal como sucede en Suiza; cualquier iniciativa importante para la ciudadanía debería pasar por la verdadera soberanía popular, sin intermediarios; eso no quiere decir que haya votaciones cada fin de semana, sino que en las múltiples convocatorias que ya tenemos deberían añadirse urnas con varias consultas populares cada vez, eso sí, que no sean detallitos de cara a la galería, sino verdaderos temas de Estado.

triston escribió:personalmente considero que deberíamos de votar masivamente a partidos de izquierda de verdad ya que la única alternativa que se me ocurre para tratar de frenar las barrabasadas de los grandes partidos es que en este pais haya una izquierda fuerte.

Totalmente de acuerdo, pero el problema reside en que en nuestro país no hay ningún partido verdadero de izquierdas. De boquilla lo son unos cuantos, pero en la práctica, actúan como los de derechas y los que se dicen de centro son de la derecha más rancia.

Ahora mismo lo que veo, en la línea de lo que dice Labiche, es que hay peligro de que surja algún espabilado que recoja el malestar y nos encontremos con algún partido de extrema derecha. Tipo Le Pen en Francia, vaya, incluso más a la derecha.

En resumen, hay un buen caldo de cultivo para el retorno del fascismo. Miedo me da.

¿Y la izquierda es el PSOE?, es cierto que prefiero al PSOE antes que al PP, pero vamos, que más bien debería decir que odio más al PP que al PSOE. En cuanto a IU, es una organización tan patética que me da vergüenza votarles, aparte de que donde gobiernan o ayudan a gobernar poco o nada hacen de lo que dicen; son una mezcla de cosas que uno no sabe ya cómo definirlos, quizá mejor que dejen al PCE a secas y que vuelvan a defender otro modelo de sociedad de una forma clara y abierta.

Opino como Frozen, respecto a Izquierda Unida.

Antiguamente solía votarles. Pero aquí en Cataluña ocurrió algo que me ha desencantado de las urnas, supongo que definitivamente.

Resulta que voté a Izquierda Unida, que en esta CCAA concurre a las elecciones con las siglas Iniciativa per Catalunya; pues resulta que obtuvieron unos resultados importantes y consiguieron entrar en el gobierno de la Generalitat, junto con el PSC y Esquerra Republicana.

Pero cuando negociaron para repartirse las consellerías o ministerios, al representante de Iniciativa per Catalunya le ofrecieron la cartera de INTERIOR.

Hubo un debate interno en esta coalición y muchas voces dentro del partido le exigían a su portavoz, Joan Saura, que se negara en redondo a aceptar la cartera de Interior. Que era preferible quedarse sin entrar en el gobierno antes de asumir una consellería que implicaba dirigir a las fuerzas de orden, las cuales todos sabéis que están para repartir leña al pueblo, mayormente.

Pero como el poder es muy goloso y corrompe, el tal Joan Saura no dudó en aceptar dicha cartera. Y ahora resulta que el representante de un partido que debería representar a la izquierda de esta CCAA, o la única izquierda verdadera, tal como ellos anunciaban en la campaña electoral, se ha convertido en el perro policía más despiadado y atroz que se pueda conocer. Un aguerrido defensor de la propiedad privada y de los demás intereses de la burguesía catalana de rancio abolengo.

Y resulta que, cuando varias asociaciones de estudiantes se manifestaron en Barcelona para oponerse a la aprobación del llamado Plan Bolonía, que convertía la universidad en una feria mercantilista con planes de estudios que implicaban trabajar grátis para las empresas si quieres sacarte el título universitario, pues resulta que el tal Joan Saura no dudó en ordenar a sus perros policías que cargaran contra los manifestantes, hiriendo a bastantes de ellos e incluso a varios periodistas que cubrían el evento.

Y allí los veías a esos pobres chavalitos, algunos de ellos con un libro o una rosa en la mano, pidiendo justicia social y demás y luego a las fuerzas del orden dirigidas por Iniciativa per Catalunya, repartiendo tortas a diestro y siniestro. ¡ Vaya una Iniciativa...!

Cuando ví aquello por la tele me sentí totalmente estafado y hasta con complejo de gilipollas, por haberles votado; y me juré a mi mismo que nunca más perdería el tiempo yendo a votar en las elecciones.

Y hasta la fecha...



(PD: Por otra parte, del acto transfuguista que Rosa Aguilar cometió en Córdoba, pasandose a las filas del PSOE, mejor no comentamos nada, ¿no?...)

inifugo escribió:

Cuando ví aquello por la tele me sentí totalmente estafado y hasta con complejo de gilipollas, por haberles votado; y me juré a mi mismo que nunca más perdería el tiempo yendo a votar en las elecciones.

Esto es lo que pasa por confiar en el hombre, si se sigue con esta mentalidad, me temo que te llevarás muchas mas desilusiones en la vida.

Se ruega no copiar el texto entero que se cita, sobretodo si se trata del mensaje inmediatamente anterior y si dicho mensaje es largo.

Gracias.

Está claro que la máxima de "una persona, un voto", no se cumple en absoluto, basta ver que los votos de los vascos cuentan más que los votos de quienes estamos a la izquierda del PSOE. Si a eso le unimos que el voto es un cheque en blanco a una organización que sistemáticamente utiliza fraudulentamente dicho cheque, pues ya me diréis qué democracia es la que tenemos.

No recuerdo qué escritor fue el que comentó una vez un pequeño cuento para explicar la situación electoral de la mayoría de los países, contaba que un cocinero preguntó a unas verduras cómo deseaban ser cocinadas, a lo cual esas verduras respondieron que en realidad ellas no deseaban ser cocinadas, el cocinero dijo que eso no era posible, era incuestionable que serían cocinadas, aunque podían elegir cómo. Pues bien, así vivimos los electores en el mundo, podemos elegir quién nos va a maltratar, pero ¿por qué no podemos elegir a alguien que no nos maltrate?